CONFIANZA A PESAR DE LAS DIFICULTADES (SALMO 3)
I. La Importancia de Confiar.
II. La Base de Nuestra Confianza.
III. El Contenido de Nuestra Confianza.
IV. El Resultado Por Haber Confiado.
SALMO 3.
CONFIANZA A PESAR DE LAS DIFICULTADES.
Al leer el Salmo 3 nos damos cuenta que la idea principal es: «Confianza a pesar de las dificultades». Y para comprender este pensamiento les sugiero seguir cuatro importantes observaciones.
I) La importancia de confiar; ¿por qué debemos confiar?
II)La base de nuestra confianza; ¿cuál debe ser la base de nuestra confianza.
III) El contenido de nuestra confianza.
IV) El resultado que produce la confianza en Dios.
I) Dijimos que la idea principal de este Salmo en todo su contenido es confianza a pesar de las dificultades. En primer lugar observemos la importancia de confiar, vrs. 1-2. ¿Por qué es importante confiar en Dios? En el vr. 1 dice David que el enemigo es grande: «¡Oh, Jehová, cuánto se han multiplicado mis adversarios! Muchos son los que se levantan contra mí». En el vr. 2 leemos que ese enemigo tiene influencia y que esa influencia es terrible porque es una influencia mental. Había muchos que querían carcomer la mente de David y colocarlo en un estado tal de desesperación que no pudiera sustentarse.
¿Cuál es entonces la lección que podemos aprender de la importancia de confiar a través de la incertidumbre? En el Nuevo Testamento en la epístola a los Efesios Cap. 6:12, la Escritura nos muestra que tenemos una lucha real, con un enemigo que es real; tenemos un enemigo que no obstante no lo vemos, que no lo palpamos, pero que sin discusión alguna es un enemigo absolutamente real.
Confianza a pesar de las dificultades; ¿por qué debemos confiar? Debemos confiar en Dios porque permanentemente tenemos un enemigo que es grande y se multiplica, y que es de gran influencia en nuestra vida. Debemos estar equipados y preparados para enfrentarlo.
II) En segundo lugar notemos la base o la importancia de nuestra confianza. Dicha confianza debe ser la certidumbre de recibir la gracia de Dios. En el hebreo está un poquitito más simple todavía y dice: «Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mi; mi gloria, y el que levanta mi cabeza». (vr.3). Podemos ver entonces a través de este versículo que la gracia de Dios es suficiente para protegernos. La gracia de Dios es lo que necesitamos para tener protección. «Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mi…» Vemos asimismo que la gracia de Dios no solo nos protege sino que brinda a Dios gloria: «Mas tú, Jehová, eres…mi gloria…» Por último el vr. 3 dice: «Mas tú, Jehová, eres…el que levanta mi cabeza». Por lo tanto vemos que en la gracia de Dios actúan tres etapas de protección para nuestra vida en las cuales debemos basar nuestra confianza: Primero, que la gracia de Dios es suficiente para nosotros; segundo, que la gloria de Dios es suficiente para nosotros; y tercero, que la gracia y gloria de Dios son suficientes para levantarnos de donde hemos caído.
Esto nos hace recordar una lección muy práctica que encontramos en 2a. Corintios Cap. 12: 8-9, donde Pablo pide al Señor por cierta protección y dice: «…respecto a lo cual tres veces le he rogado al Señor, que lo quite de mi». Y la respuesta fue la siguiente: «Bástate mi gracia…» Es decir, que la gracia de Dios era suficiente para sostenerlo.
En este Salmo que nos habla de la confianza en Dios a pesar de las dificultades, debemos mantener permanentemente atenta nuestra mente a la importancia de confiar. Esa importancia se ve clara y precisa a través de la certidumbre de la presencia de nuestro enemigo el diablo, quien es grande y puede ejercer influencia sobre nuestras vidas si le dejamos.
¿Cuál es entonces la base de esa confianza todopoderosa? la base de esa confianza es ni más ni menos la certidumbre de que la gracia de Dios es suficiente para nuestra vida. No debemos buscar ningún otro objetivo en el cual basar nuestra confianza que no sea la gracia y la misericordia de Dios. Si Dios nos escucha, es como si nos respondiera. Aprendamos esta pequeña lección práctica.
III)En tercer lugar, veamos ahora el contenido en sí mismo de la confianza. ¿En qué cosas debemos confiar? ¿Qué es lo que tenemos que confiar? El vr. 5 nos habla de que el conocimiento del poder de Dios es suficiente para tener confianza y esperanza en Dios. «Yo me acosté y dormí, y desperté, porque Jehová me sustentaba.» Sería interesante que marquemos en nuestras Biblia esta frase: «Jehová me sustentaba» En medio del peligro; en medio de una intensa crisis política, David pudo decir: «Yo me acosté y dormí y desperté, porque Jehová me sustentaba».
El contenido de la confianza en sí es el conocimiento del poder de Dios, y ese poder es suficiente para preservarnos. El poder de Dios de acuerdo a la Biblia, es el evangelio. En Romanos Cap. 1:16 vemos que ese poder de Dios es el que nos preserva; no solamente el evangelio nos salva y nos lleva a una relación personal con Dios, sino que también nos protege. Podemos decir también que el vr. 6 nos habla de una confianza en Dios que nos habilita delante de él: «No temeré a diez millares de gente, que pusieren sitio contra mí». He aquí el verdadero contenido de la confianza: El conocimiento del poder de Dios a través de una confianza en él. Cuando conocimos que las fuerzas vitales y dinámicas del evangelio nos salvaron y nos llevaron a un conocimiento total del Padre, y a una sumisión de nuestra vida hacia él, entonces vamos a aprender y ver que ahora podemos depositar nuestra confianza en él. El contenido de nuestra confianza es el poder de Dios. Podemos decir que la lección práctica que proviene de los vrs. 5-6 es esta: Que nosotros debemos tener la plena seguridad que nuestra confianza en Dios es suficiente.
IV)Finalmente, ¿Cuál es el resultado de una confianza semejante? La certidumbre de una victoria segura en las manos de Dios. Pedimos a Dios entonces que sobre la base de su gracia en nuestra vida, sobre la base de lo que él ha hecho por nosotros, ahora nosotros depositamos nuestra confianza en El y consecuentemente le pedimos que actúe interfiriendo en los asuntos de nuestra vida. Le decimos a Dios con las mismas palabras de David: «Levántate, Jehová; sálvame, Dios mío, porque tú heriste a todos mis enemigos en la mejilla; Los dientes de los perversos quebrantaste». Vemos que lo que Dios ha hecho para con nosotros debe ser suficiente como para confiar. Cuando confiamos en la gracia y poder de Dios, entonces tenemos derecho de levantarnos y pedirle que intervenga en nuestra vida, y que ponga el dinamismo y la habilidad que sólo a él le pertenece. En el vr. 7 cuando dice: «Porque tú heriste a todos mis enemigos en la mejilla; los dientes de los perversos quebrantaste», notamos que los verbos «heriste» y «quebrantaste» están en el tiempo pasado. Quiere decir que David nos está dando conocimiento y experiencia pasada. Esto nos habla de otro aspecto importante en el resultado de la confianza que debemos tener en Dios, y nos habla también que si en el pasado hemos obtenido una victoria total, si en el pasado hemos obtenido una victoria absoluta en las manos de Dios, entonces ¿por qué no seguir confiando en Dios? De lo cual deducimos que el resultado de nuestra confianza será cada día mayor y mayor. Dios se ha presentado, manifestado y obrado en una manera totalmente poderosa. Por lo cual tenemos la certidumbre de que la victoria es segura en las manos de Dios.
¿Cómo podemos tener un resultado semejante? Pidiéndole a Dios que intervenga en nuestra vida. La victoria es del Señor; ese es el resultado de nuestra confianza. Pensemos en esto: Dios tiene la victoria final. Cuando eso está centrado en nuestra mente, el objetivo de nuestra vida cambia a pesar de todas las dificultades que podamos enfrentar. Nunca recibimos de Dios una sacudida más grande de lo que merecemos y necesitamos para nuestra purificación. Recordemos esto.
(Programa radial con Gabriel Otero)
necesito imprmir esto y no puedo
Enviado. Bendiciones.
es urgente es para un trabajo me serviria de ayuda porfaa alguiennn
Enviado por email. Bendiciones
Hola!!! Buenísima la pagina… bendiciones!!!
Dios habló a mi vida mediante esta reflexion, estuve pasando por algo espiritual, este capitulo me hizo reflexionar mucho.
De mucha ayuda espiritual y bendición.Gracias Padre por tu amor eterno y fiel al estar siempre pendiente de mi y responderme por este medio.
Bendiciones