Madres Que Oran
Lectura: 1 Samuel 1:9-20
Trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu madre….
–2 Timoteo 1:5.
La fe y las oraciones de las madres pueden causar un profundo impacto en las vidas de sus hijos. Primera de Samuel 1 registra la súplica de Ana y la respuesta de Dios en el nacimiento de su hijo Samuel. Y en una carta a Timoteo, Pablo se refirió a la fe de la madre de Timoteo, fe que estoy seguro se expresó en fervientes oraciones por Timoteo. No es de extrañar que Dios lo usara en la iglesia primitiva.
Conozco a la esposa de un pastor que es una mujer de oración. Siempre que su esposo salía para asistir a una reunión o visita importante, ella oraba por él y pedía a Dios que lo guiase, lo protegiese y le diese sabiduría y fortaleza. Generalmente oraba en voz alta y sus hijos a menudo la escuchaban, pero nunca se detuvo a pensar en el impacto que aquello tendría en ellos.
¡Cuál no sería el deleite de esta madre cuando su hija, que se iba a otra ciudad a estudiar en la universidad, le dijo que irse del hogar se le hacía más fácil porque sabía que su madre oraría por ella y seguiría orando!
A veces las madres se sienten frustradas porque creen que están limitadas en lo que pueden hacer por sus hijos. Sin embargo, siempre pueden orar, y sus oraciones se hallan entre los dones más preciados de todos.
Las oraciones de una madre pueden
construir una fortaleza alrededor de sus hijos.
NPD/ -DCE