Lectura: Hechos 4:5-12
…porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.
—Hechos 4:12.
Es increíble ver cuántas marcas de cereales para el desayuno hay en un típico supermercado norteamericano. E independientemente de los innumerables anuncios que destacan las virtudes de un cereal sobre otro, la mayoría de las marcas ofrecen el mismo valor nutritivo y satisfacción para el hambre.
¿Sucede lo mismo con la salvación de nuestra alma? En el supermercado de las religiones, ¿no son todas las creencias y dogmas espiritualmente nutritivos y verdaderos?
¡Por supuesto que no! Pero esa es la conclusión común de muchas personas, incluyendo algunos llamados eruditos de la Biblia. Un teólogo que se aferra a tan radicalmente errónea perspectiva de las Escrituras escribió: «Si «salvo» significa estar unidos y reconciliados con Dios, entonces Hechos 4:12 es palpablemente falso. Hay muchos caminos auténticos para llegar a Dios, y ninguna religión posee la franquicia de la iluminación.»
La insistencia del escritor es una negación abierta de la Palabra de Dios, la cual nos dice que el sacrificio de Cristo por el pecado es la única forma de tener una correcta relación con Dios. La salvación está disponible por medio de la fe en Cristo (Jn. 14:6), y es totalmente gratuita para todo el que la acepte por fe.
Encontrar la verdad espiritual no es lo mismo que comprar cereales. Sólo hay una elección correcta. Cerciórate de que tú, y los que te rodean, entienden la diferencia.
La sinceridad no sustituye a la verdad.
-VCG/NPD