Génesis 3:1-4:26
Mateo 2:13-3:6
Salmo 2:1-12
Proverbios 1:7-9
Génesis 3-4:26
1 Entre los animales salvajes que Dios creó, no había otro más astuto que la serpiente. Un día, la serpiente le dijo a la mujer:
—¿Así que Dios les dijo que no comieran de ningún árbol del jardín?
2 La mujer le contestó:
—¡Sí podemos comer de cualquier árbol del jardín! 3 Lo que Dios nos dijo fue: “En medio del jardín hay un árbol, que no deben ni tocarlo. Tampoco vayan a comer de su fruto, pues si lo hacen morirán”.
Pero la serpiente insistió:
4 —Eso es mentira. No morirán. 5 Dios bien sabe que, cuando ustedes coman del fruto de ese árbol, serán iguales a Dios y podrán conocer el bien y el mal.
6 La mujer se fijó en que el fruto del árbol sí se podía comer, y que sólo de verlo se antojaba y daban ganas de alcanzar sabiduría. Arrancó entonces uno de los frutos, y comió. Luego le dio a su esposo, que estaba allí con ella, y también él comió. 7 En ese mismo instante se dieron cuenta de lo que habían hecho y de que estaban desnudos. Entonces tomaron unas hojas de higuera y las cosieron para cubrirse con ellas.
8 Con el viento de la tarde, el hombre y su esposa oyeron que Dios iba y venía por el jardín, así que corrieron a esconderse de él entre los árboles. 9 Pero Dios llamó al hombre y le preguntó:
—¿Dónde estás?
10 Y el hombre le contestó: —Oí tu voz en el jardín y tuve miedo, pues estoy desnudo. Por eso corrí a esconderme.
11 —¿Y cómo sabes que estás desnudo? —le preguntó Dios—. ¿Acaso comiste del fruto del árbol que te prohibí comer?
12 El hombre respondió:
—La mujer que tú me diste por compañera me dio del fruto del árbol. Por eso me lo comí.
13 Dios se dirigió entonces a la mujer, y le dijo: —¿Qué es lo que has hecho?
Y la mujer le respondió: —La serpiente me tendió una trampa. Por eso comí del fruto.
14 Entonces Dios le dijo a la serpiente:
«Por esto que has hecho, maldita seas, más que todo animal doméstico;?¡más que todo animal salvaje!?Mientras tengas vida, te arrastrarás sobre tu vientre y comerás el polvo de la tierra.
15 »Haré que tú y la mujer, sean enemigas; pondré enemistad entre sus descendientes y los tuyos.?Un hijo suyo te aplastará la cabeza, y tú le morderás el talón».
16 A la mujer le dijo: «Cuando tengas tus hijos, ¡haré que los tengas con muchos dolores! A pesar de todo, desearás tener hijos con tu esposo, y él será quien te domine».
17 Al hombre le dijo: «Ahora por tu culpa la tierra estará bajo maldición, pues le hiciste caso a tu esposa y comiste del árbol del que te prohibí comer.Por eso, mientras tengas vida, te costará mucho trabajo obtener de la tierra tu alimento.
18 Sólo te dará espinos que te hieran, y la hierba del campo será tu alimento.
19 »Muy duro tendrás que trabajar para conseguir tus alimentos. Así será hasta el día en que mueras, y vuelvas al polvo de la tierra, del cual fuiste tomado. Tú no eres más que polvo, ¡y al polvo tendrás que volver!»
20 Entonces el hombre le puso a su esposa el nombre de Eva,[a] porque ella sería la madre de todos los que iban a vivir en la tierra.
21 Luego Dios vistió al hombre y a su esposa con ropas de piel, 22 y dijo:
«Ahora el hombre y la mujer son como uno de nosotros, pues conocen el bien y el mal. Si llegaran a comer algún fruto del árbol de la vida, podrían vivir para siempre».
23 Por eso Dios los expulsó del jardín de Edén, y puso al hombre a cultivar la tierra de donde había sido formado. 24 Después de expulsar al hombre y a la mujer, Dios puso unos querubines al este del Edén, y también puso una espada encendida que giraba hacia todos lados, para impedir que alguien se acercara al árbol de la vida.
4
1 El hombre tuvo relaciones sexuales con su mujer Eva, y ella quedó embarazada y tuvo un hijo. Lo llamó Caín porque dijo: «¡Gracias a Dios he tenido[b] un varoncito!» 2 Después volvió a tener otro hijo, que se llamó Abel. Caín se dedicó a cultivar la tierra, mientras que Abel fue pastor de ovejas.
3 Pasó el tiempo, y un día Caín le presentó a Dios una ofrenda de los frutos que cultivaba. 4 Por su parte Abel escogió las primeras crías más gordas de sus ovejas, y se las llevó a Dios como ofrenda. Dios recibió con mucho agrado la ofrenda de Abel, 5 pero no recibió con el mismo gusto la ofrenda de Caín. Esto le molestó mucho a Caín, y en su cara se le veía lo enojado que estaba.
6 Entonces Dios le preguntó a Caín:
«¿Por qué estás tan triste y enojado? 7 Si haces lo correcto, siempre te aceptaré con agrado, pero si haces lo malo, el pecado está listo para atacarte como un león. ¡No te dejes dominar por él!»
8 Un día, Caín invitó a su hermano. Cuando llegaron al campo, Caín golpeó a su hermano y lo mató.
9 Más tarde, Dios le preguntó a Caín:
—¿Dónde está tu hermano?
Y Caín le respondió: —No lo sé. ¡No tengo por qué cuidarlo!
10 Entonces Dios le dijo: —¿Por qué has matado a tu hermano? ¡Desde la tierra la sangre de tu hermano pide venganza! ¡Esto no puede dejarse sin castigo! 11-12 Maldito serás, y la tierra que cultives no te producirá nada, pues has matado a tu hermano y esa misma tierra se bebió su sangre. Por eso andarás por la tierra como un vagabundo, que no tiene donde vivir.
13 Entonces Caín le dijo a Dios: —Ese castigo es más de lo que puedo soportar. 14 Hoy me estás condenando a vivir en la tierra como un vagabundo. Tendré que andar escondiéndome de ti, y cualquiera que me encuentre me matará.
15 Pero Dios le respondió: —De ninguna manera. Si alguien se atreve a matarte, sufrirá un castigo siete veces peor.
Entonces Dios le puso a Caín una marca, para que nadie se atreviera a matarlo. 16 Así fue como Caín se apartó de la presencia de Dios y se fue a vivir al país de los vagabundos, al este del Edén.
17 Caín tuvo relaciones sexuales con su esposa, y ella quedó embarazada y tuvo un hijo al que llamó Henoc. En ese tiempo Caín estaba construyendo una ciudad, y en honor de su hijo también la llamó Henoc.
18 Ésta es la lista de los descendientes de Caín: Henoc, Irad, Mehujael, Metusael, Lámec.
19 Lámec tuvo dos esposas. Una de ellas se llamaba Adá, y la otra se llamaba Sila. 20 Adá fue la madre de Jabal, que fue el primero en habitar en tiendas de campaña y en dedicarse a la cría de ganado. 21 Jabal tuvo un hermano llamado Jubal, que fue quien inventó el arpa y la flauta.
22 Sila tuvo también un hijo. Se llamaba Tubal-caín, y se dedicaba a fabricar toda clase de herramientas de bronce y de hierro. Su hermana se llamaba Naamá.
23 Un día, Lámec les dijo a sus dos esposas: «Adá y Sila, esposas mías:?¡escúchenme, préstenme atención! Si alguien me hiere, o me hace algún daño, sea niño o sea hombre, lo mataré.
24 Si el que hiera a Caín será castigado siete veces, el que me hiera a mí?será castigado setenta y siete veces».
25 Adán[c] volvió a tener relaciones sexuales con su esposa, y ella tuvo un hijo, al cual le puso por nombre Set, pues dijo: «Dios me concedió[d] otro hijo en lugar de Abel, a quien mató Caín.» 26 También Set tuvo un hijo, y le puso por nombre Enós. A partir de entonces se comenzó a adorar a Dios usando su nombre.[e]
Notas al pie:
[a] Génesis 3:20 El nombre Eva tiene un sonido parecido a la palabra hebrea que significa vida.
[b] Génesis 4:1 He tenido. El nombre Caín tiene un sonido parecido a la palabra hebrea que significa he tenido.
[c] Génesis 4:25 Adán. A partir de este versículo, la palabra hebrea hasta ahora traducida como hombre o ser humano se usa también como nombre propio.
[d] Génesis 4:25 Me concedió. El nombre Set tiene un sonido parecido a la palabra hebrea que significa me concedió .
[e] Génesis 4:26 Su nombre, es decir, Yahveh.
Mateo 2:13-3:6
13 Después de que los sabios regresaron a su país, un ángel de Dios se le apareció a José en un sueño y le dijo: «Levántate. Escapa a Egipto con el niño y con su madre, y quédate allá hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo.»
14 Esa noche, José escapó a Egipto con María y con el niño, 15 y se quedó allí hasta que Herodes murió. Así se cumplió lo que Dios había dicho por medio del profeta: «De Egipto llamé a mi hijo».
Herodes intenta matar a Jesús
16 Cuando Herodes se dio cuenta de que los sabios lo habían engañado, se puso muy furioso y mandó matar a todos los niños menores de dos años, que vivieran en Belén y sus alrededores. 17 Así se cumplió lo que Dios dijo por medio del profeta Jeremías:
18 «Grandes llantos y lamentos oyó la gente de Ramá.?Era Raquel, que lloraba por la muerte de sus hijos, y no quería ser consolada.»
19 Herodes murió cuando José todavía estaba en Egipto. Entonces un ángel de Dios se le apareció a José en un sueño 20 y le dijo: «Regresa ahora mismo a Israel, junto con el niño y la madre, porque ya murieron los que querían matar al niño.»
21 José, María y el niño regresaron a Israel. 22 Pero José tuvo miedo de ir a la región de Judea porque supo que Arquelao, el hijo de Herodes, era el nuevo rey allí. Entonces el ángel de Dios le dijo a José que siguiera hasta la región de Galilea.
23 Cuando llegaron allá, se fueron a vivir a un pueblo llamado Nazaret. Así se cumplió lo que Dios había dicho por medio de los profetas: «El Mesías será llamado nazareno».
3
1 Años después, Juan el Bautista salió al desierto de Judea para predicarle a la gente. Les decía: 2 «Vuélvanse a Dios, porque muy pronto su reino se establecerá aquí.»
3 Juan era la persona de quien hablaba el profeta Isaías cuando dijo:
«Alguien grita en el desierto: “Prepárenle el camino al Señor. ¡Ábranle paso!?¡Que no encuentre estorbos!”»
4 Juan se vestía con ropa hecha de pelo de camello y usaba un taparrabos de cuero. Comía saltamontes y miel silvestre.
5 Muchos iban a oír a Juan. Llegaban no sólo de los alrededores del río Jordán, sino también de la región de Judea y de Jerusalén. 6 Confesaban sus pecados y él los bautizaba en el río.
Salmos 2:1-12
2
1-2 ¿Por qué se rebelan contra Dios las naciones y los pueblos??¿Por qué estudian la manera de luchar contra él y contra su rey??¡Inútiles son los planes de los reyes de este mundo!
3 ¡Quieren acabar con su poder! ¡Quieren librarse de su dominio!
4 Pero Dios desde su trono se ríe y se burla de ellos.
5 Luego se enoja y los reprende, se enfurece y los asusta.
6 Los amenaza diciendo: «Ya elegí al rey que gobernará desde el monte Sión, que es mi montaña santa».
7 Voy a dar a conocer lo que Dios ha decidido.?Él me dijo: «Tú eres mi hijo; desde hoy soy tu padre.
8 ¡Pídeme lo que quieras! Te daré como herencia las naciones; ¡todo el mundo será tuyo!
9 Gobernarás a las naciones con mano de hierro; ¡las destrozarás ?como a ollas de barro!»
10 Ustedes los reyes, pónganse a pensar; déjense enseñar, gobernantes de la tierra.
11 Adoren a Dios con reverencia; y con alegría ríndanle culto.
12 Adoren a Dios, para que no se enoje, pues fácilmente se enfurece, y podría quitarles la vida.
¡Dios bendice a todos los que en él confían!
Proverbios 1:7-9
7 Todo el que quiera ser sabio debe empezar por obedecer a Dios.?Pero la gente ignorante no quiere ser corregida ni llegar a ser sabia.
8 Querido jovencito: Atiende a tu padre cuando te llame la atención, y muestra respeto cuando tu madre te enseñe.
9 Sus enseñanzas te adornarán como una corona en la cabeza, como un collar en el cuello.
Traducción en lenguaje actual (TLA)